En 2014, se inició un proyecto de cultivo en Tiassalé, Costa de Marfil, financiado por Fredy Hiestand y dirigido por Johann Dähler. Se encargó a ECOTOP la instalación y el apoyo agrícola del proyecto. En un área de 60 hectáreas, en la que se cultivaron piñas en monocultivo durante más de 30 años, el sitio degradado de la sabana será reintroducido en un ecosistema forestal productivo a través de la aplicación de los principios de la agroforestería dinámica.

El cacao se planta en hileras separadas 3 m, la distancia entre las hileras de cacao es de al menos 4 m (833 árboles/ha). El espacio intermedio está cubierto por sabana (Panicum maximum), que se utiliza para la producción de biomasa durante los primeros años. Este debe ser cortado mecánicamente de forma regular. A continuación, los esquejes se apilan en las hileras de cacao.

Entre los árboles de cacao se plantan plátanos, anacardos, otras especies de árboles frutales, madera de alta calidad y palmas de aceite. Durante el primer año, también se integraron la mandioca y otras culturas alimenticias.

A una distancia de 16 m x 6 m se planta además caucho. De esta manera, se obtienen efectos sinérgicos positivos debido al uso combinado de caucho, anacardo, palma aceitera y cacao.